Romance de las Rosas, Quinto Libro, Melodía En Clímax.
Poesía de los Personajes
Amaris:
“Alabad al Señor de nuestras almas, porque grande es su Gloria y su Majestad; ángeles cantad eternamente al Todopoderoso. Alabad a Dios, Él es el creador de todos nosotros; nuestras almas son de Él y para Él; nuestro gozo y alabanza sea para nuestro Dios Todopoderoso…”
Los Ángeles De Dios:
“Almas del gran Dios eterno, mirad su poderío, somos adoradores del Creador; gloria y alabanza al Señor de nuestras vidas; incansable es nuestra boca para alabarle, inagotable nuestra alma para adorarle, eterno es nuestro gozo por Él y para Él. Mirad su Gloria Eterna; alma mía adora a tu creador…”
Amezed:
“En mi corazón nace el deseo de tener alma, un alma libre con la que pueda amar. Dios, ¿por qué no me amas? Para mí no existe castigo ni recompensa, sin alma no tengo razón de vivir. Dios, ¿por qué me apartas de ti, si yo te amo? Dios, quítame el corazón, pero dame un alma…”
El Ángel Del Señor:
“Justicia sobre el enemigo de Dios, porque su pecado ha llegado a herir su Espíritu Divino; la herida ha creado una Sustancia Divina, que será puesta en el corazón del hombre maldito que ha herido a nuestro Dios. La misericordia nunca amanezca sobre su cabeza, que su dolor sea grande y que su sufrimiento sea terrible, hasta amar el fuego del infierno…”
Gracián:
“El dolor ha caído en mí, se desgarra mi alma en el sufrimiento; mi corazón llora en la desesperación. Corre mi espíritu por la venganza; me ciega la ira y me atormenta la sombra de la muerte; no descansará mi ira hasta que mis enemigos sean atormentados por mi propia mano, y su sufrimiento sea en mi sombra…”
Raquel:
“Mira mi alma, dulce Señor, conoce que en cada amanecer quiero ver tu luz; tu misericordia sea sobre mi alma, extiende tus brazos hacia mí, amado Dios; tu mirada nunca se aparte de mí, porque te necesito hasta ver tu santidad. Cuídame en tus hermosas manos, acaríciame con ellas. ¡Dios de mi alma, tócame con tu Gracia…!”
Las Cartas De Dorian:
“Cuando la vida se deja de sentir, la muerte no se deja esperar, pero si la esperanza existe, la muerte se aparta; si los sentimientos se pierden, aún quedan los latidos del corazón que gimen por los recuerdos que dan vida al alma. La Esencia Sublime nacerá cuando todo se haya perdido, para entender que está sobre el mismo amor…”
Alejandro:
“Como gota de agua en un desierto, es mi esperanza imborrable; si las lágrimas de mi alma se deslizaran suavemente sobre tus labios, conocerías el verdadero dolor que he estado soportando en el sufrimiento silencioso de mi corazón; ¡oh sueño perdido, cuántas veces te he buscado! La luz se disipa y mi corazón calla…”
Oriana:
“Tristeza mía, hasta dónde llegará; convierte mi lamento en el gozo más sublime que pueda conocer. Mi corazón quiere respirar tu aliento, mi alma suspira en tu luz. Dios abrázame en el cielo donde está mi regalo; quiero estar a tu lado donde ya no pueda sentir tristeza en mi ser, sino todo el gozo de estar rodeada de tu Resplandor Divino…”
Fátima:
“Yo vi su rostro lleno de luz y amor, y en sus manos estaba la misericordia y la esperanza viva de que cada lágrima encarnada pueda creer en la eternidad. Dios es tu enemigo, y sólo debes resistir; porque no tardará en tener misericordia del que sobrevive a su Ira. Busca en tu alma; Dorian, no desmayes ni blasfemes, porque falta mucho para tu muerte…”
El Corazón De Alejandro:
“¿Cuál es el pecado que no perdonas? El amor y el odio han venido a mí, ellos han engendrado en mi espíritu. Buscaré hasta la muerte tu rostro, ¡oh Dios Verdadero, revela tu Luz! Prueba el sabor de mis lágrimas, porque quiero conocer el Espíritu Eterno de Salvación. Hasta cuándo arderá mi alma por hallar la Esperanza de Vida; mi espíritu muerto clama por vivir. Corazón sangrante cubierto de lágrimas viene a ti…”
Meylin:
“Escucho una linda voz en mi corazón, siento una melodía en mi alma, deseo tocar el cielo y mirar la luz que resplandece, y ver que la mano de Dios escribe mi nombre en El Libro de la Vida. Quiero llorar en la inmensidad de su misericordia y besar su rostro; quiero caminar junto al Señor en las calles de oro y correr sobre los mares de cristal…”
Neaurus:
“Tus palabras hieren el aire, con tu eco lastimas el agua, y tu voz estremece las piedras. Dios, La Esencia Sublime quiere despertar para que las promesas sublimes se cumplan. Hasta cuándo me deleitaré en contemplar la maravilla de la sustancia divina, que está en el corazón de un hijo de ángel, una lágrima encarnada que ha perdido su alma por desafiar tu voluntad…”
El Ángel De La Espada Encendida:
“Busco las lágrimas que salieron de mis ojos porque han encarnado, y deseo cuidarlas, pero mi amor que nace desde el centro del sol me ha apartado de ellas. Mis latidos arden por buscarlas, y mi aliento me dice que viven; las maldiciones de mi espada no cesan de salir, y su fuego alza su voz para atormentar a aquellos que se rebelan contra Dios; mi corazón se quema por amar…”
Zenón:
“Derrama misericordia sobre cada lágrima encarnada, resplandezca tu esperanza sobre ellos; llena el vacío que corre por sus venas, alimenta sus corazones con el gozo sublime; Dios de alabanza y de adoración, escucha sus almas porque sus latidos claman por la luz divina desde la oscuridad que los ha maldecido, perdona su pecado de haber nacido…”
Rosaura:
“¡Venganza! ¡Venganza! ¡Venganza! Ha caído sobre los enemigos.
¡Justicia! ¡Justicia! ¡Justicia! Ha caído sobre los malditos. Al ver el sufrimiento eterno de los enemigos y de los malditos; mi alma clama en desgarramiento por la misericordia. ¡Oh Dios Verdadero!
¡Derrama de tu Vida Eterna! ¡Señor, cierra la boca del infierno!
¡Derrama de la Esperanza Eterna…!
Dorian:
“Mi alma promete escribir tu nombre, con mi propia sangre, en El Libro De La Vida de Dios; para liberarte del castigo eterno, la muerte segunda. ¡Oh, hija del arcángel Miguel! Mi alma ama desesperadamente, con gran amor insoportable, que desgarra a mi corazón y le deja sin aliento…”
El Ángel De Luz:
“Yo soy el pecado de Dios, la luz que dejará de ser; dejaré de conocer la belleza perfecta que hay en mí. ¿Por qué yo seré la maldad? ¿Por qué mi corazón se llenó de orgullo? Mi hogar será el fuego, y mi lamento será eterno; ¿dónde encontraré la felicidad y el gozo que tenía, cuando estaba en los cielos?”
Los Ancianos:
“La guerra por tu alma es grande, y sólo es una decisión, ¿cómo piensas elegir? La muerte es tu enemiga, y el pecado es el amante de la muerte, y el pecado es mi hijo que nace en tu corazón. La maldad es tu sombra y yo soy la luz que la produce; cuando cae la noche, el miedo de la condenación te despierta…”
El Alma De Amaris:
“Perdona a mi corazón por no amarte. ¡Oh, hijo del ángel Gabriel! Me prometes liberar a mi alma de todo dolor; pero quién te librará del dolor que sientes por mí. Tu corazón llora por mi alma cuando cae la noche, incansable sufrimiento es tu amor por mí, a quien no debes de amar…”
El Ángel De Los Misterios:
“Por adoración a mi alma he sido entregado a la Ira de Dios, mi boca selló a mi alma para la tercera muerte; todos aquellos que me adoraron fueron destruidos y consumidos por el fuego de la Ira del Todopoderoso…”
¡Oh, alma mía, mira por tu destino!